Probando mi varita

Tras llegar de Olivander's decide probar su nuevo artilugio. Al llegar a lo que a partir de ahora sería su nueva morada, decide entrar en una habitación cualquiera cerrando la puerta tras de sí. Recordaba algunos de los hechizos que le había explicado su padre, pero no tenía demasiado claro como realizarllos, de modo que decidió probar suerte, tras sacar su varita de su mochila la mira con cara espectante como su fuese a tomar vida propia.

- Vale y... ahora que puñetas hago contigo?

Alex habla desde el otro lado de la puerta, apoyado contra ella de espaldas a la habitacion pero se escucha claramente su vos - ¿No deberias buscar un maestro que te explique la diferencia entre una varita y una daga? Y sobre todo, como usar tu nuevo instrumento -

Tras escuchar la voz de Alexander, mira a su alrededor atenta buscando alguien que pueda encontrarse en la habitación y que le haya pasado desapercibido.

- Imposible.. piensa para sí. Lo habría notado.

Al no distinguir a nadie se vuelve hacia la puerta y la abre bruscamente. Tras ella encuentra a Alexander. Ladea su cabeza sonriendo con suficiencia.

- Nos encontramos de nuevo... y veo que ya te percataste de mi nueva adquisición. Haciendo bailar la varita frente a ella. Y.. sí, creo que tengo un problema con ella. No sé que demonios tengo que hacer para que funcione. Observándola fijamente.

sonrie - tienes que hacer un hechizo, supongo que no conoces ninguno verdad? quieres que te enseñe? -

Encogiendo los hombros y pasando la varita varias veces frente a su rostro como si de un juguete se tratara.

- Mi padre me habló de algunos, pero.... sinceramente jamás creí que los necesitara. Sonriendo a Alexander. Si la esneñanza es gratuíta... porqué no? Y si tiene coste, me gustaría conocerlo antes para ver si merece la pena.

entra en la habitacion - yo ya te ofreci enseñarte y ya aceptaste que lo haga... esto no cambia nada - se sienta en la cama de Amelia

Lo sigue con la mirada hasta verlo sentarse en su cama.

- No te invité a entrar. Sin moverse de su lugar. No es cortés entrar en la alcoba de una dama sin que ella te invite. Riendo de medio lado camina hasta el escritorio y se sienta a horcajadas en la silla.

- Bien... entonces cuándo y cómo me vas a enseñar a usar esto. Levantando la varita.

- ahora y como se pueda - sonrie - deja de decirle esto, tu varita es parte de ti ahora. no te respondera bien si la tratas como a un accesorio inutil -

Encogiéndose de hombros.

- No sabía que un trozo de madera pudiese sentirse mal. Mirando su varita con un gesto despectivo.

Mueve la cabeza de un lado a otro en forma negativa - hagamos una prueba, primero te enseñare un hechizo simple, wingardiun leviosa, repitelo -

Tras mirar a Alexander divertida mira de nuevo su varita ladeando la cabeza algo indecisa ante lo que iba a hacer.

- Ok!... veamos.... WINGARDIUM LEVIOSA. De forma fortuita señala un libro que descansaba sobre su escritorio.

El miembro 'Amelia Greyback' ha efectuado la acción siguiente: Lanzar dados

'D6' :

Resultados :

- Muy bien! tienes talento! - camina acercándose - inténtalo de nuevo

Al ver que el libro se elevaba sobre el escritorio no puede evitar una mirada de asombro en sus ojos.

- Vaya, esto está muy bien. Dice mirando su varita de forma divertida. Ok, veamos si soy capaz de repetirlo. Contesta sonriendo maliciosamente a Alexander. Esta vez apunta con su varita a la silla que se encuentra junto al escritorio y pronuncia de forma clara

- WINGARDIUM LEVIOSA!

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'D6' :

Resultados :

Ve elevarse la silla - Muy bien! tienes talento... -

Levanta una ceja y lo mira de lado.

- Sí, ya lo dijiste antes. Conseguirás que mi ego crezca aún más.

ríe divertido - eso sera difícil - le saca la lengua relajado y alegre - bueno... y ahora que debería enseñarte... flipendo quizás?

Su cara muestra un gesto de asombro al ver la nueva forma de comportarse de Alexander.

- Vaya, si sabes reir. Agrega sin perder su sonrisa de desconfianza a la vez que encoge sus hombros. Pues no sé... tu eres el maestro, tu sabrás que debo aprender.

Se da cuenta de lo tranquilo que esta y se extraña de si mismo - ya que soy el maestro y decido yo seguiremos con flipendo, lista? -

Relaja su rostro y sonríe divertida.

- Como desees.

Toma una silla y la coloca en medio de la habitación - presta atención - mira a la silla y lanza - Flipendo! - la silla vuela hasta el extremo de la habitación luego Alex la vuelve a poner en su lugar - intentalo -

En su cara se dibuja un gesto de asombro.

- Vaya Black! Veo que eres todo un experto en esto de dominar la varita. Sonríe divertida a la vez que apunta con su varita hacia la silla y pronuncia el hechizo.

- FLIPENDO!

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